Páginas

29 de septiembre de 2009

Merendando sopa

Los niños vienen de fábrica sin ningún complejo ni estereotipo. Ni con la moda (puede que les haga feliz llevar dos calcetines diferentes), ni con la comida (mi hijo en McDonals mojaba las patatas fritas en el yogur).

Al crecer nos vamos encasillando según las costumbres de nuestro país y nos acostumbramos a que no se come lentejas en el desayuno, ni se merienda sopa. Pero cuando nuestra variedad de alimentos aptos se reduce tenemos que volver a la infancia y atrevernos a probar cosas nuevas.

La última vez que estuve en Boston, ciudad que me encanta, era una calurosa y húmeda tarde de finales de agosto. Paseando, paseando llegamos a Quincy Market. Antiguo mercado emblemático de la ciudad en donde paramos a merendar. Para mí la merienda es un café con algo de bollería. Como hacía mucho calor hubiera preferido un zumo o refresco con algo salado para picar, pero cuando empecé a ver qué opciones tenía, las posibilidades se redujeron. Así que después de preguntar un rato y olvidarme de mis estereotipos decidí merendar lo más típico del lugar: Clam Chowder. Una deliciosa sopa de almejas y patatas muy típica de la zona de Nueva Inglaterra. Le pregunté al empleado si llevaba gluten y me dijo: “¡Qué casualidad! Justo otra persona me acaba de preguntar lo mismo. Puede comerla sin problema porque se hace con almidón de maíz (corn starch)”. Así que a pesar del calor y lo que sudé, disfrute mucho mi “merienda”. Algo que me encanta de Estados Unidos es no tener horarios para comer.


Sopa de alubias negrasEsta no fue la primera vez que rompí los esquemas de comida. El primer día que estuve en Boston nos fuimos a visitar la Universidad de Harvard y cuando decidimos merendar en Harvard Square paramos en un “Au bon pain” y lo único que había “Gluten free” fue una sopa de alubias negras (Black beans) que estaba deliciosa. Calor, humedad y la sopa a las 5 de la tarde. Además de caliente, era un poco picante. La foto está cortada porque me sudaban hasta las pestañas, pero estaba tan rico que merendaría lo mismo cada lunes.

4 comentarios:

  1. "Algo que me encanta de Estados Unidos es no tener horarios para comer", cosa que nos hizo sufrir un monton, cuando despues de pasar todo el dias haciendo turismo en Jaen, decidimos parar en un cafe para comer un bocata, y la persona de la barra, de muy mal humor nos dijo que a esa hora solo se servia cafe y punto!!

    ResponderEliminar
  2. Imagínate si le hubieras pedido un bocata sin gluten.

    ResponderEliminar
  3. Toda tu peregrinación por "un mundo sin gluten" es útil porque como eres curiosa le servirá a otra gente. Lo de la sopa de merienda me ha parecido mundial, porque me recuerda que este invierno yo he merendado algún día una sopa de verduras que sólo tiene verduras, que resulta muy agradable en los días de frío. Besitos. Toya

    ResponderEliminar
  4. Con este frío se agradece cualquier cosa caliente, pero ese día hacía mucho calor y húmedo, sin embargo hay que mirar el lado positivo: es más saludable merendar un plato de sopa que un donut o churros y así le hacemos la guerra a la celulitis... :-)

    ResponderEliminar

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.